sábado, 19 de enero de 2013

Día 7. El viaje ha llegado a su fin!!!

Hoy no tenemos prisa para levantarnos porque hasta la noche no tenemos previsto volar, así que, bajamos a desayunar tranquilamente y más tarde pasaremos por el aeropuerto para que nos informen del estado de los vuelos.
El desayuno se sirve en un bonito salón desde donde podemos disfrutar de la bonita estampa que ha dejado la nevada de esta noche.


No todos los días empezamos la jornada con estas vistas!!


Hacemos el check-out y uno de los recepcionistas nos acompaña al taxi para pagar el servicio de transporte hasta el aeropuerto.

Lo primero que hacemos es mirar si el aeropuerto de Estambul dispone de servicio de taquillas para poder dejar las maletas mientras pasamos el día en la ciudad hasta que salga nuestro vuelo esta noche; si alguien las necesitara que sepa que sí disponen de este servicio.
En la oficina de Swiss nos confirman que podemos volar esta noche en el vuelo de las 21:00 horas con escala en Zurich, pero, si estamos conformes nos pueden poner en la lista de espera del vuelo directo de Turkish Airlines de las 14:00 horas. Con esta segunda opción nos aseguramos no quedarnos "tirados" en Suiza por las nevadas que están cayendo en gran parte de Europa.
No dudamos ni un momento y decidimos plantarnos en la cola de facturación de Turkish y ponerle caritas a la azafata para que nos asigne un par de asientos directos a nuestra casa!!
Falta poco más de media hora para la salida del vuelo cuando nos confirman el vuelo de las 14:00 horas y nos facturan el equipaje sin hacer la larga cola en facturación.
Ahora nos toca correr por el aeropuerto, pedir más de un favor para saltarnos las colas de control de pasaporte y estar atentos a las pantallas para que no nos cambien la puerta de embarque.

Llegamos corriendo a la puerta de embarque y la azafata nos dice que no nos preocupemos porque el vuelo sale con retraso.
Hemos tenido un rato de desconcierto sin saber si salíamos o nos volvían a cancelar el vuelo, cuando por fin nuestro vuelo despega y Estambul nos regala esta última imagen de la ciudad!!!


Volar con Turkish Airlines es un placer, hemos hecho con ellos otros vuelos y podemos decir que el servicio, comida, entretenimiento... es excelente. Se merecen los premios que han recibido los últimos años como mejor compañía aérea mundial y europea.

Aprovechamos para hacer balance de este viaje. Estambul ha sido una grata sorpresa para nosotros, habíamos leído que es una de las ciudades más bonitas del mundo y ahora podemos decir que estamos completamente de acuerdo!!  
Nos vamos de Estambul sin disfrutar de un atardecer desde el lado asiático y sin realizar el crucero por el Bósforo porque el tiempo no nos ha acompañado, pero, mirando el lado positivo ya tenemos la excusa para volver a esta gran ciudad!!!

Nos despedimos de todos con la cabeza puesta en la siguiente aventura viajera....





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